Plan de comunicación con librerías: gánate la confianza de los libreros en cinco pasos

Las librerías se han mantenido un año más como los puntos de venta preferidos por los lectores para adquirir nuevos libros. Así lo deja claro el Barómetro de Hábitos de Lectura y Compra de Libros en España 2019. Y es que estos negocios siguen haciendo valer su cartera de clientes fidelizados y su cercanía con los mismos. Dos cualidades que hacen que queden por delante de otros canales de compra como los marketplaces digitales.

Además, el librero es una importante fuente de información para saber cómo gestionar el catálogo propio. Un paso importantísimo a la hora de establecer una estrategia editorial acorde a la realidad de los lectores. Por este motivo, la interacción con estos puntos de venta es fundamental. De esta manera, proponemos un plan de comunicación con librerías que esperamos te sirva de ayuda.

Comunicación con librerías

Antes de establecer un plan de comunicación con librerías es importante saber el método que se va a seguir para acercarse a estos puntos de venta. La fórmula más tradicional es la de confiar esta misión a un distribuidor, quien reparte los ejemplares de la editorial por distintos lugares para que pueda venderse este stock.

La otra fórmula implica que es el editor quien contacta directamente con la librería para hacerle llegar su catálogo. Si bien esta relación implica una mayor carga de trabajo, a la larga esta inversión de tiempo tiene su recompensa. Un premio que se traduce en datos que ayudan a conocer mejor al lector, descubriendo cuáles son sus intereses y posibles fallos en el catálogo.

Además, las nuevas tecnologías permiten hacer más rápida la comunicación con las librerías. Son varios los instrumentos que conectan a ambos eslabones de la cadena del libro, una relación que incluso puede ejecutarse en directo.

Gestiona tu imagen editorial

Las primeras impresiones cuentan. A la hora de establecer tu plan de comunicación con librerías lo primero que debes de tener en cuenta es que estos negocios buscan lo mismo que tú: vender libros. Una mala imagen puede hacer pensar a los libreros que no merece apostar por tu catálogo.

En esta primera toma de contacto debes transmitirle al librero la tranquilidad de que tu catálogo puede venderse. Por ello, no está de más asegurarte de a quién te estás dirigiendo. Por ejemplo, poco sentido tiene apuntar a una librería especializada en títulos sobre jardinería, cuando tu catálogo es de cocina.

¿Qué valores les vas a aportar?

Recuerda, la misión de la librería es la de vender libros. Es por este motivo que el librero tiene que tener muy claro qué valor aportaréis, tú y tu catálogo, a su negocio. En este punto nada mejor que elaborar el DAFO (Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades) de tu catálogo. De esta forma, tendrás una base sobre la que comenzar a hablar.

No solo eso, cuando el librero destaque las Debilidades y Amenazas de tu oferta editorial, podrás responderle ya que tú mismo serás consciente de ellas (y habrás comenzado a trabajar en una manera de ponerles solución).

Crea la sensación de una comunidad

Cuando un lector compra un libro desconoce todos los eslabones por los que ha pasado. Agentes que forman parte de un mismo sector con un claro interés común: vender. Mientras más se refuerce toda la cadena, mayor probabilidad de éxito existirá. Por este motivo, la librería debe sentir que pertenece a una comunidad.

Esto pasa por un plan de comunicación con librerías que vaya más allá de una estrategia comercial. Los editores deben interesarse por la situación de estos puntos de venta, saber si se están cumpliendo los objetivos y elaborar, de manera conjunta, nuevas fórmulas con las que conquistar a los lectores.

Además, el librero debe tener la seguridad de que cuando llame para solucionar dudas o para solventar problemas con el catálogo, va a obtener respuesta. Otra buena idea para que se genere el sentimiento de pertenencia a una comunidad es la de integrar el mapa de librerías en tu web, de esta forma los visitantes de tu web sabrá exactamente cuáles son los puntos de venta a través de los que puede hacerse con tus libros.